Pérdida constante de cuota de mercado del bus en favor del Ave.
Desde que comenzó la crisis en 2008 el autobús ha visto como descendía su número de viajeros, acrecentándose su descenso debido a la baja de precios en los billetes Ave.
Y es que hoy en día podemos encontrar los mismos precios en billetes de tren que de autocar, o incluso dentro de la línea de autobuses, encontrar los mismos precios al viajar en Supra o preferente que en una línea regular.
Bus pierde cuota de mercado frente al tren
Y como vemos, no solo el avión está perdiendo en esta guerra de precios y de cuotas de mercado, si bien el autobús, a pesar de su declive, en 2013 trasportaron a 106 millones de viajeros en buses interurbanos. Y Renfe transportó a 25 millones de personas, el mejor dato de toda su historia.
Lógicamente, en los trayectos donde más se nota el descenso de usuarios para el autobús es donde existen los mismos trayectos en bus que en tren de Alta Velocidad o Ave.
Viajar a Alicante en bus o en Ave
Algunos de los trayectos donde más ha caído el uso del autobús como medio de transporte son el de Madrid Valencia y Madrid Alicante donde la demanda de autobús ha bajado un 25%. Y es que tenemos billetes Ave Madrid Valencia desde 10.70 euros y billetes Ave Madrid Alicante desde 8.40 euros.
También la tasa de pasajeros entre Madrid y Sevilla por carretera se ha desplomado hasta casi un 20%.
Una de las conexiones que menos ha notado el acaparamiento del Ave es la de Madrid-Zaragoza-Barcelona, con una caída de “tan solo” el 10% de pasajeros.
Desde luego, si nos basamos en precios similares y tenemos en cuenta las enormes ventajas del Ave sobre otros medios de transporte, no es de extrañar esta caída en la demanda de usuarios en avión y autobús, puesto que en Ave la duración real del trayecto es menor, la comodidad es mayor, en Ave puedes levantarte, ir a la cafetería, comer en tu asiento, sin esperas ni antes y después de subir al tren, contando con el compromiso de puntualidad de Renfe, sin anulaciones por mal tiempo, con estaciones de origen y llegada céntricas. Poco más se puede pedir ¿Verdad?